Joyce Manor @ Caradura

Foto: Óscar Villanueva

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Foto: Óscar Villanueva

Por Stephanie Rosales @Phananarama

El pasado sábado 21 de enero, el Caradura albergó un muy especial concierto que, además de iniciar el píe izquierdo todo lo que respecta al cuarto aniversario de la tienda de discos local Carcoma Records, trajo por vez primera al cuarteto californiano Joyce Manor en una noche de Punk Pop en Caradura que muchos atesorarán por siempre.

Pasadas las 9PM y con un aforo considerable, los primeros en tomar el escenario fueron los locales de Sheena La Cebra y Nevado, quienes tuvieron a uno que otro presente cantando y brincando, mucha de la acción también sucedía afuera del club donde la mercancía del acto estelar volaba como pan caliente.

El momento de la presentación de Joyce Manor llegó antes de siquiera llegar a la media noche, y es de hacer mención de la gran figura y presencia que el grupo tiene en la escena; no solo poseen talento, compromiso y profesionalismo, sino que la gente los adora y se venía muchos tenían rato esperando para verlos por fin de este lado. Muchos se abalanzaron sobre el micrófono al momento de “Beach Community” y “Derailed”, comiéndose el escenario a gritos y aplausos para sorpresa del joven grupo de Pop Punk que claramente se veía atónito de ver la respuesta de un público que seguramente jamás pensaron conocer.

Agradecimientos, mensajes de amor y saludos fueron respondidos con brincos de descontrol y body surfin’ que si bien era de esperarse realmente la banda carece de muchos temas que se presten para este ritual debido a que su sonido por veces es más como Rock Pop y por veces Emo lejos de las bandas con las que usualmente celebra su aniversario Carcoma Records como Capitalist Casualties o Tragedy. “Catalina Fight Song”, “Leather Jacket” y “Constant Nothing” fueron coreadas al unísono; la sola imagen de ver al grupo y audiencia conectada como uno enchinaba la piel.

Una celebración al género, a una tienda de discos, y un show memorable serían frases que vendrían a la cabeza para describir lo acontecido el pasado sábado; pero más allá de descripciones, laureles o remembranzas, fue un inolvidable concierto de gritos a todo pulmón.