Com Truise
Clark
Por Diego Álvarez Rex
Más que un concierto, el cierre de la gira de Clark y Com Truise por Norteamérica fue una especie de ceremonia cuyo eje, el poder de la música electrónica, fue para quienes pudieron estar presentes una catártica e irrepetible experiencia. A pesar de no contar con el quórum esperado para dos actos fuertes de Ghostly International y el legendario Warp Records, quienes lo vivieron seguro llegaron a casa a contarle a sus conocidos el gran acierto que fue haber ido.
En necesario un paréntesis de la narración para exponer que este cierre de gira que prometía ser un lleno total no logró ni llenar el foro a la mitad debido a tener como competencia un pequeño festival llamado Diversa en El Plaza Condesa con la DJ norteamericana Nomi Ruiz (vocalista de Hercules & Love Affair), los islandeses GusGus y como acto sorpresa a Bostich + Fussible, y si bien no parecer ser un cartel rival para alguien como Clark y Com Truise, lamentablemente tuvo el foro semivacío e inclusive a la prensa desinteresada puesto que también coincidió con el debut en CDMX de Ed Sheeran. ¡Mala onda, viejo!
A pesar de abrir puertas desde las 9PM, la afluencia dentro y fuera del recinto fue bastante pobre al grado de ni siquiera parecer noche de concierto. Tras una hora de abrir puertas, Gonzalo Rufino, autodenominado como El Día mezcló literalmente para un puñado de personas dentro de SALA Corona. El lugar estaba lejos de tener un quórum considerable y aquellos pocos presentes parecían más entretenidos con sus celulares. A decir verdad, El Día no estuvo mal e inclusive fue una adición bastante adecuada por su mezcla de Techo y Ambient.
Siendo puntual con los horarios, hasta que conectar el set del norteamericano Seth Haley retrasó todo diez minutos. De la mesa que tenían esquinada para el acto nacional al podio principal, Com Truise puso de nueva cuenta a bailar a la audiencia mexicana con su infalible mezcla de Synthwave, Italo Disco y House. Con un nuevo LP bajo el brazo, el set predominó con piezas de Itineration, más dejó escuchar “VHS Sex” y “Colorvision” para un SALA Corona que dejaba ver más puñados de personas más jamás dio la impresión de llenarse.
Llegada la media noche, tras ver como la caja de luces led junto al podio comenzó a probarse con pequeños destellos de colores, varios incautos comenzaron a conglomerarse de manera céntrica del recinto para tener vista panorámica, o tal vez para grabarlo mejor con el celular, pero ciertamente por fin se pudo ver una masa de gente con tragos del patrocinador en turno lista para devorar el prometido regreso de Clark a nuestro país, después de un épico set en MUTEK 2015 donde mucho se habló como la mejor presentación de todo el festival.
Es difícil describir la ejecución en vivo de Death Peak, el más reciente material de Chris Clark bajo la Warp Records debido al impacto musical y visual que fue presenciar semejante calidad en directo. Mientras que el disco es una de las piezas cumbre en su exploración del IDM y la experimentación, destellos de Dark Ambient y Techno permean temas que se extienden a territorios inclasificables de ruido rosa y estática cautivantes en absoluto trance. El complemento visual, un juego de luces tanto elemental como impactante, creó la perfecta compañía para el set de una hora que pasó de lo contemplativo al frenesí.
Su presentación fue absolutamente envolvente, capaz de hacerte olvidar dónde estás, quién eres y qué estás haciendo. Piezas como “Peak Magnetic”, “Hoova” y “Un UK” pudieron representar una masa que tomó a los presentes e hizo con ellos lo que quiso. Chris Clark inclusive se permitió dar un encore para aquellos que se entregaron a su presentación.
Tal vez el mejor recital de música electrónica en lo que va del año, y lamentablemente uno de los más pasados por alto.