Your body is young but your mind is very old:
25 años de Dig Your Own Hole de los Chemical Brothers
Por Ernesto Acosta Sandoval
“Where Do I Begin” aparece en la curva final de Dig Your Own Hole, el segundo álbum de los Chemical Brothers, en ese momento en el crees que ya no te puede sorprender más un disco que durante casi una hora ha transcurrido sin interrupciones. La canción es una colaboración con Beth Orton, que para 1997 ya tenía dos álbumes y poco a poco estaba cimentando su reputación con una voz que remitía a la calma de Elizabeth Fraser y un estilo similar al de Kate Bush pero más áspero. “Where Do I Begin” es la canción que rompe el ritmo en Dig Your Own Hole, un álbum que desde sus primeros instantes se anuncia como heredero directo y continuador del House manchesteriano malogrado de finales de los ochentas. Al grito de “Back with another one of those block rockin’ beats!” todo estalla y a partir de ese momento la fiesta no se detiene. y te exige que te muevas con lo que estos dos DJs están haciendo. Dig Your Own Hole es un álbum al que no se le ven la costuras por ningún lado y todo se va hilvanando como si fuera una toma constante en una película que transcurre en un club oscuro y caluroso. En cada canción sucede lo mismo, justo cuando crees que ya se puso repetitiva, Rowlands y Simons le meten un cambio imperceptible para que la cosa siga fluyendo. Esto era ser cool en 1997. Y sólo necesitabas un par de secuenciadores, samplers y voces invitadas como Noel Gallagher en “Setting Sun” (que le dio un giro sorprendente a los Beatles) o la propia Orton.
Los Chemical Brothers no estaban descubriendo el hilo negro ni inventando nada nuevo aquí, pero sí estaban volando amplificadores sin necesidad de conectar guitarras ni querer comerse al mundo abiertamente. Sin hacer mucho aspaviento, estos dos chavitos de Manchester le estaban regresando el estatus de super estrella a la figura del DJ, mismo estatus que se sostiene hasta nuestros días. De paso, estaban definiendo la cultura del rave como nadie se había atrevido hacerlo hasta entonces con canciones como “Elektrobank”, “Don’t Stop The Rock”, “The Private Psychedelic Reel” o “Lost In The K-Hole”. Todo para amarrarlo al final con la mejor canción sobre la cruda que pueda existir.
Sí, “Where Do I Begin” se siente como un aterrizaje casi forzoso, pero también es la definición exacta sobre lo que es despertar el domingo en la mañana sin saber qué te golpeó, en un nivel básico. Si lo vemos más de cerca, en marzo de 1997, los Chemical Brothers, bajita la mano, ya empezaban a poner de manifiesto las angustias pre-milenarias que la enorme mayoría de sus congéneres comenzarían a explorar durante los siguientes meses y años. “Where Do I Begin” y Dig Your Own Hole son un primer acercamiento a intentar ponerle punto final al siglo XX y comenzar a preguntarse qué es lo que sigue, aun cuando la respuesta sea elusiva o uno de plano no tenga ganas de enfrentarla.
