Foto cortesía OCESA (Nancy Martínez)
Foto cortesía OCESA (Nancy Martínez)
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Foto cortesía OCESA (Nancy Martínez)
SÉP7IMO DÍA, NO DESCANSARÉ (desde Buenos Aires)
Por Cristal Ortiz desde Buenos Aires, Argentina
Recuerdo que en mi niñez fui un par de veces al circo, sinceramente nunca me llamó mucho la atención todo eso de los payasos, los malabares y los animales, además de que no me gustaba ver animales en cautiverio y después de ver como los hacían lograr los actos quedé traumada.
De ahí no volví a tener contacto con un circo como tal, durante mucho tiempo escuché sobre las diferentes producciones del Cirque Du Soleil y la verdad es que tampoco moría de ganas por ver alguno de los montajes de la franquicia canadiense.
En diciembre del año pasado hice un viaje a Las Vegas, y como quería ver un espectáculo (y no me iba e echar uno de Britney, Ricky Martin o Diplo porque justo ese fin no tenía set en el Encore) optamos por The Beatles LOVE. Noventa minutos de sorpresas, aunque no soy fan de la banda, me descubrí cantando el ochenta por ciento de los temas, la producción fue impecable, los artistas que realizan sus totalmente cuidadas y hermosas rutinas, los arreglos a las canciones, la ubicación en el contexto histórico de la banda a través del espectáculo me dejaron con ganas de ver Michael Jackson ONE en la siguiente visita a la “ciudad del pecado”.
Fue así que al enterarme de la preparación de Soda Stereo Sep7imo Dia, No descansaré, que ahora montaba el Cirque, lo vi como una oportunidad que no debía dejar pasar. Se anunciaron las fechas (que empezaron acá en Buenos Aires el 9 de marzo y terminan el 14 de mayo) y el tour (que pasará por Perú, Chile, Colombia y México), definitivamente no podía decepcionar, la música de la banda latinoamericana más emblemática de las últimas décadas y el respaldo de la franquicia no podían ofrecernos menos.
Y así mientras esperaba a que llegara la fecha en la que me tocaba ir, me encontré con una nota que presentaba la opinión de Tweety González “el cuarto Soda”, tecladista y productor de la banda donde se leía: “… Tendría que verlo ahora ya montadito, estrenado, también me parece que se sacrificó un poquito la música en pos del espectáculo… Si Gustavo está, no se hace. Se hubiese hecho otra gira de Soda, dos de hecho. La idea era hacer una gira cada cinco años, estaba la del 2012 y la de este año”.
Inmediatamente le di escucha a los tracks que componen Sép7imo Día, álbum que se utiliza como soundtrack del show, y me dio la impresión de que ese no era Gustavo, no el Gustavo que nos dejó con la boca abierta con el Comfort y Música para volar del MTV Unplugged.
Llegó el día, ayer fui a ver el show, mi entrada era para la zona que ustedes les venderán este 4 de mayo como Zoom Zone, si pueden traten de no comprar boletos en esta zona, estarán más cerca de la acción del espectáculo pero van a perder la mayoría de las acciones en moverse de un lado a otro para dejar pasar a toda la producción a montar y desmontar los actos que suceden fuera del escenario.
No les voy a contar toda el show pero puedo definirlo como: los mamados que te encuentras en el gym disfrazados de carnaval haciendo sus rutinas a ritmo de las canciones de Soda Stereo. Sí, tiene actos rescatables como el de la caja de agua con “Hombre al agua“, o la chica suspendida por un cable sostenida solo por su propio cabello en “Luna Roja” me parece que juegan más por la nostalgia de los fans de la banda que por ofrecer un espectáculo al nivel del resto de los que ofrece actualmente el Cirque en otras ciudades. No tienen nada que envidiarle a los malabaristas de Coyoacán y a nuestro extinto Circo Atayde Hermanos. Mejor en el séptimo día, descansen.
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