Por Óscar Villanueva
La relación que se ha desarrollado entre el cineasta Tim Burton y el músico Danny Elfman no podría ser más complementaria, normalmente cuando se menciona uno, inmediatamente se viene a la mente el otro; y es que desde su primera colaboración en La Gran Aventura de Pee Wee en 1985, -a partir de la familiaridad de Burton con Oingo Boingo, el grupo en el que estaba Danny Elfman antes-, han construido algunas de las escenas en relación imagen-sonido más memorables del cine.
Aún cuando éste concierto ya se había presentado en el 2014 en el Auditorio, la nueva fecha tenía el gran extra de que sucedería en Halloween y que mejor noche para que todos los personajes que ha creado Burton (especialmente Jack Skellington) sean recordados a través de la música. En parte por la fecha y en parte porque los mejores disfraces tendría la oportunidad de estar en un meet and greet con Elfman, mucha gente de verdad se dio vuelo, se veían Jacks por ahí, cadáveres de novia por allá, los Maitland de Beetlejuice y obviamente un batallón de jóvenes manos de tijeras por todos los niveles de la Arena.
Comenzando a las 9, la música fue Interpretada por la Camareta Metropolitana y el coro Enharmonia Vocalis llevados por el director John Mauceri, el concierto se dividió en dos actos divididos por un intermedio; del primer acto las partes más ovacionadas fueron las dedicas a Beetlejuice y las dos películas de Batman. Del segundo acto, El Cadáver de la Novia y El Joven Manos de Tijera (en la cua la violinista Sandy Cameron realizó una excelente intervención) fue donde nuevamente el público dejo sentir su apreció, pero el plato fuerte fue El Extraño Mundo de Jack, donde el propio Elfman salió a cantar las ya canciones clásicas de la película: “Jack’s Lament”, “What’s this?”, “Poor Jack”. Para “This is Halloween” se valió de la ayuda de Jonathan Davis, cantante de Korn aprovechando su visita al Knotfest y la mancuerna resultó perfecta. La otra invitada de la noche, Susana Zabaleta en vistoso disfraz, salió para cantar “Sally’s Song”.
Hasta ahí llegaba el programa, pero el señor Elfman aún tenía otras sorpresas bajo la manga, primero con los temas de Alicia en el País de las Maravillas, luego con el regreso de Jonathan Davis al escenario para interpretar “Kidnap the Sandy Claws” en solito y como gran final, “Oogie Booie’s Song” fue la cereza del pastel. Una noche bastante mágica que será recordada por todos los que asistieron.
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