The Weeknd
Dawn FM
XO / Republic
5.5
Se están haciendo cosas nuevas que antes también se hacían
Por Lecce
Los tiempos actuales facilitan mucho el registro del pasado y del presente; esto hace, que a los viejos como yo, les parezcan poco sorprendentes muchas cosas. Nos sesgamos en el “esto yo lo hizo tal”, “se parece a tal” y un montón de arrogantes enunciados que, aunque parezca así, no intentan desacreditar sino, de una manera probablemente ruda, procura ubicar una especie de ‘Premio a la Oda a lo que ya fue y va a seguir siendo”. Esta constante necesidad de demostrar que sabemos pues.
Así es Dawn FM, un disco en el que no pasa nada sino tienes menos de 30 años. Lo más rescatable del primer track (“Dawn FM“) es la voz de Jim Carrey (yeap, me quedé igual). “Gasoline” y “How Do I Make You Love Me?” pasan más desapercibidas que el reboot de Rebelde.
“Take My Breath” es todo lo que uno espera de un disco Pop. Sonidos que parecen el producto de un híbrido musical de un OST de película de Nicolas Winding Refn (Drive) y un bonito homenaje al legado de producción dejado por Daft Punk. Alguna vez escuché que un buen productor no debe de tener un sello perceptible sino moldeable al artista, en “Sacrifice“, track producido por Swedish House Mafia, suena a todo menos a SWM y eso se agradece. Estos dos tracks, estrellita en la frente.
Siguiendo con esta oda que Abel tiene años haciéndole a la música de los 80s, era imposible que no tocáramos la arista de Quincy Jones con “A Tale By Quincy“, que funciona perfecto como preludio otro gran track del disco por muchos motivos, uno es el sampleo perfecto (que seguro usted ya habrá visto en un tweet mamador) de “Midnight Pretenders” de Tomoko Aran. Culturalmente esta conexión dice mucho y eso es de aplaudir para los productores del disco.
Tyler G. Okonma se dio un tiempo antes de su rebautizo para colaborar en “Here We Go… Again“, una baladita bien bonita de su carita que honestamente si la cantara Ariana Grande en lugar de Makkonen, nadie se daría cuenta. Aún así buen track.
“Best Friends” y “Is There Someone Else?” son de esas canciones por los cuales uno ya no debería de estar haciendo esta reseña. Serán como himnos para la chaviza que se emocionó con el estreno de EUPHORIA. Si me preguntan, de estos dos, destacaría más el décimo track del disco sobre el 9.
Con “Starry Eyes” y “Every Angel is Terrifying” tampoco pasa nada, entiendo que la intención de hacer un disco como una estación de radio es crear un concepto (porque esto ni a disco conceptual llega) pero canciones como estas sobran, regresando a la analogía de EUPHORIA, esta canción es como las tomas contemplativas y larguísimas de los personajes. Muy bonitas y todo pero no dicen mucho.
Con “Don’t Break My Heart“, el disco empieza a terminar de agonizar y da pie a otra colaboración en Dawn FM: “I Heard You’re Married” con Lil’ Wayne en la voz, de poco a nada que decir de este par tampoco. Irónicamente el penúltimo track se llama “Less Than Zero” pero me parece uno de los tracks más cute; Synth Pop melódico, armonías cándidas al escucha. Inclusive creo que infravalorado, en mi opinión (de acuerdo a los plays que tiene en Spotify).
Jim Carrey nos despide de Dawn FM, probablemente como otro highlight del disco: “Phantom Regret by Jim” es para escuchar pacheco y todo bien.
Dawn FM de The Weeknd no es malo, como no son malos los primeros tacos que te encuentras después de un “jueves de cervezas”, como no es malo el pedazo de azúcar en la rosca.. el disco es malo, nada que celebrar.
En tiempos donde las pequeñas victorias son plausibles, los invito a escuchar Chuntaros Radio Poder y me expliquen por qué es mejor disco que Dawn FM.