Armenia:
Memorias desde Colombia
Por Eduardo Lara @lalolarete
Es extraño pensar los miles de procesos que nos atraviesan al mismo tiempo. Las memorias colectivas que se esconden entre las multitudes que nos rodean; y el trauma, dolor, aquellos recuerdos mal logrados que intentamos olvidar pero que en ese afán solamente se vuelven más difíciles de dejar atrás. Manifestaciones en nuestras palabras y movimientos diarios que terminan delatando una herida que no ha sanado. Armenia sabe bien esto. Originarios de Colombia, saben lo que es salir a la calle con el miedo de no regresar; o peor aún: que un ser amado no llegue a casa y vivir con la duda asfixiante de no saber su paradero. Al menos de esto habla su más reciente sencillo “Te sigo buscando”.
A través de sintetizadores y guitarras que recuerdan por ratos a U2 (y a sus discípulos como The Killers), su música es liderada por unas fuertes vocales que exclama Juan Toro (también guitarrista). En esos teclados cargados de una nostalgia ochentera tenemos a Ricardo Laverde, Samuel Huertas es quien da un toque Funk en el bajo, Daniel Cardona en la batería, y en la segunda guitarra tenemos a Juan Simón Ramírez.
Dentro de otros sonidos similares podemos encontrar en Armenia, hay un fuerte coqueteo con el Glam hispano como el de Alaska. Otros sonidos como el movimiento de Rock en Español, como Enanitos Verdes (especial énfasis en sus guitarras). Pero en un panorama más contemporáneo encontramos que a veces hay un juego entre esas líneas de bajo cargadas de Funk, pero con un ambiente Lo-fi que recuerda a actos como Little Jesus; pero de forma más interesante hay influencia de Rosalía (cuentan con un cover a “Pienso en tu Mirá” que es una mezcla entre Post Punk, y una especie de Dark Synth que queda muy bien). Finalmente, en su esencia como banda hay un dejo o rastro de aspiraciones a ser Rock de arena; tal vez es por la fuerza en el cantar de Toro, o por el reverb que se escucha al final de cada nota. Sea como sea, muy probablemente en vivo explotan esto y, seguro, los hace un acto que seguir para ver en vivo.
En “Te sigo buscando” encontramos una canción que al principio parece ser una canción del fin de una relación amorosa, no lo sabemos realmente, pero suena cliché la letra. Pero a la mitad hay un juego muy interesante en el que escuchamos a comunicadores colombianos destacando Diana Uribe (divulgadora de la historia colombiana) hablar de la situación de violencia del país que llevan décadas sufriendo; pero sobre todo la situación de desapariciones. Y ahí la canción da un giro radical y toma un sentido distinto. Una confusión entre ganas de bailar y gritar, pero también un profundo dolor por la situación. Y así Armenia funciona como un ejercicio de memoria y reflexión colectiva respecto a una situación que parece esconderse, y que se hace un esfuerzo de olvidarse. Pero en ese intento por borrar algo así es cuando la herida más llega a sentirse. Mostrando que el arte es, de nuevo, un buen lugar para recordar y sanar.