Tainy
DATA
NEON16
9.5
Sintiéndote humano de nuevo
Por Eduardo Lara @lalolarete
Por allá de los 60s y 70s en Jamaica empezaron a hacerse reuniones los fines de semana donde un DJ pondría las canciones de moda que sonaban en la radio, las mezclaría con una base rítmica de fondo, el público bailaría y cantaría las canciones que sonaban, pero también agregaban nuevas frases, las transformaban a su gusto, con el DJ a veces ayudando en esta transformación popular bajando las voces, subiendo los bajos, etc.; así comenzó el Dancehall como ritmo y movimiento.
Y es que la Revolución Industrial y su cambio tecnológico nos trajo muchas cosas, entre ellas las jornadas laborales largas, el capital como prioridad en la vida social, la explotación del trabajador en pro de mayores ganancias al punto de quitarles la humanidad y corporalidad a las y los trabajadores a lo largo del mundo “modernizado”. Otra cosa que trajo fueron esas fiestas de Dancehall jamaiquinas, que luego se exportaron a otros países latinos, Puerto Rico por ejemplo, en el cual el DJ y la música popular se hicieron una herramienta fundamental para la liberación, pero también para volver a hacernos sentir humanos de nuevo.
Pero ahora es el 2023, la música latina domina las listas de popularidad, primero el Reguetón conquistaría los números uno, y ahora el Regional Mexicano. La razón por la que los latinos están rompiendo estas listas pueden ser variadas, cada quien tiene su teoría, pero en el peak de la latinidad en la música uno de sus productores más importantes, Tainy, saca su primer álbum: DATA.
Uploading Data
En la portada de DATA vemos una mujer acostada de pelo rosa dibujada con un estilo anime (concepto que nació entre Stillz, director de videos musicales de Bad Bunny, Rosalía, etc., y Tainy) de quien le salen muchos cables de sus oídos. Esta mujer en la portada está despertando, se ve que lo hace de golpe y causa un gran impacto, como si despertara por primera vez. Y este es el eje central del disco: el despertar de la androide Sena. Los cables que salen de sus orejas, o más bien son insertados, sirven para cargar en su sistema las siguientes diecinueve canciones que vamos a escuchar.
Porque yo no soy un artista de momento, yo soy un artista pa’ siempre.
El disco abre con Myke Towers rapeando sobre una base de sintetizadores y esto sirve como una introducción al tono del disco: bases de Trap, con voces de Reguetón, Rap, Synth Pop y Synthwave; con letras con un tono bastante personal. Al acabar esta primera canción, “obstáculo”, hay un corte abrupto y comienza “PASIEMPRE”. Y esta segunda canción es probablemente uno de los proyectos más ambiciosos en la historia del Reguetón, el Trap latino y Hip Hop también. Myke Towers inicia de nuevo con un trap beat lleno de capas: percusiones, voces acompañando, sintetizadores que de repente son disruptivos, reveberb y delays. Towers da un verso agresivo, fuerte, y donde expone su orgullo de ser artista y cómo vive el éxito. Luego Jhayco hace un pequeño puente que introduce a Omar Courtz, un nuevo nombre que poco a poco ha hecho ruido con un flow traído de los orígenes del género de los mixtapes undergrounds. Jhayco nos recibe de nuevo con un verso que hace referencia a nombres clásicos como Don Omar y que termina con un pequeño silencio que es interrumpido por una voz que es en igual parte rasposa como suave: inicia el verso de Arcángel. La temática sigue en un hype gigantesco de reconocer sus éxitos como artistas y acaba con un puente donde ahora Arca, la cantante y productora venezolana, canta unas líneas sobre una niebla de notas electrónicas que de repente son un interrumpidas por un imposible de confundir “yeah yeah”: Bad Bunny es un invitado sorpresa. El conejo suelta líneas que están llenas de referencia a la carrera de Tainy: su comienzo en los dos miles siendo adolescente (y aun así creando hits), su participación en los discos Los Benjamines al lado de Luny Tunes, y a la par un shout out a ellos y Nelly el Arma secreta por descubrirlo, y de cómo desde que Benito y Tainy se juntan pegan todos los temas que sacan (esto siendo un hecho objetivamente comprobable). Y es así como Tainy en cinco minutos conjuga en una sola canción las bases del género (arcángel, referencias a la vieja escuela), con el presente (Jhayco, Omar Courtz, Myke Towers, Bad Bunny), y el futuro (Arca y su enfoque en el Reguetón diferente a lo conocido); orquestando una celebración así mismo y su carrera, y a la eternidad en sí.
Después el disco se convierte en un recorrido donde Tainy no te suelta de la mano por los siguientes 50 minutos, donde de forma precisa mezcla y une canción tras canción, haciéndote sentir que estás en un solo viaje y ves pasar en tu cabeza paisajes, recuerdos acompañados de un Tainy que conoce a la perfección a los artistas que lo acompañan. Esto hace que las colaboraciones no se sientan aisladas, sino más bien como un solo tejido de estilo donde cada timbre de voz es un medio para transportar un mensaje gigantesco en sí. Entonces tenemos a Wisin y Yandel sonando a como sonaban en su peak de popularidad a mediados y finales de los dos mil, pero con una base que coquetea con el Synthwave. Después Jhayco mezcla sus dos formas de entregar versos y coros: con una brutalidad y precisión para cada palabra, y con una armonía y delicadeza también para cantar en coros y outros. Cada artista invitado es una pieza clave para la gran celebración que monta Tainy, con viejos amigos como los extraterrestres ya mencionados, o como Zion, Arcángel, Daddy Yankee y Chencho Corleone. Actuales favoritos con los que ha sacado hits como Bad Bunny, Rauw Alejandro, Álvaro Díaz, Sech, Feid, y Ozuna. Algunos invitados inesperados pero que terminaron incorporándose a la perfección como Four Tet con Skrillex (aunque el último ya tiene algo de historial incursionando en el Reguetón), The Marias, o Kany García. Y talento nuevo que Tainy sin duda quiere ver crecer: Young Miko, Xantos, la nueva favorita de España Judeline, y Kris Floyd. Esto es el Super Smash Bros del Reguetón: todo relevante está aquí.
Marcos Masís conoce también a sus artistas invitados que saben que en punto sonaran bien, pero aún mejor sabe llevarlos a sus límites y a lugares nada familiares para ellos. Rauw Alejandro suena increíble con un base Ambient electrónica que samplea “Lush” de Four Tet, que se mezcla con un beat de Reguetón y que termina en un Dubstep de la mano de Skrillex; y Tainy le da un sentido entre sí coherente. Con Arcángel en “me jodi…” lo saca de sus barras fluidas más recientes para llevarlo de regreso a sus orígenes R&B pero bajo un filtro de brillos, o glitter, de Synth Pop y hace mucho no escuchábamos a un Austin Santos así de fresco y joven como en este track. Pero también nos recuerda que bajo las manos y dirección indicada ciertos artistas con mala racha siguen siendo unos verdaderos diamantes.
Con Sech hace mucho no lo escuchábamos tan suelto y libre como en “11 Y ONCE” que con referencias a Blink-182, su voz se vuelve un faro melódico que ilumina toda la canción acompañado de un vocoder, y que lo regresa a su sonido más melódico, y termina siendo caótico y distorsionado con un sample a Don Omar, en “Entre tú y yo”, que parece que fue sacado en realidad de Nirvana. Pero de forma más interesante es lo que hace con Ozuna en “EN VISTO”. Aquí Ozuna empieza con una base que coquetea con el Rock Pop, se mezcla con Reguetón para el coro, pero cierra con un arpegiado celestial, brillante, espaciado, lento, pero a la par la reverberación lo hace sentir lleno y que te abraza. Y la voz de Ozuna te abraza y pasea por tres minutos; y salimos recordando porque el negrito ojo claros es una de las voces más bellas de esta generación de artistas. Tainy no sólo brilla por ser un gran productor, sino que es un gran productor porque hace brillar a sus artistas.
El disco cambia de género canción tras canción, pero siempre con un toque “futurista”. Pasa por el City Pop, el Synth Wave, Synth Pop, Funk, Pop, Reguetón, pero en “SACRIFICIO” el disco cierra con un rap de Xantos con un piano que loa compaña, que al final toma más protagonismo; y lo último que escuchamos antes de volver al silencio total es un jadeo y la respiración de una mujer despertando: Sena despertó.
¿Qué es de la vida si no hay libertad?
Hay una cierta tristeza y nostalgia en el aura de DATA. La idea central de que un androide reciba a través de música los suficientes estímulos, emociones, y recuerdos para que despierte y pueda tener una idea de lo que es ser humano viene del sentir que la tecnología nos ha estado alejando entre nosotros. Dinámicas sociales desaparecidas en pro de tener todo al alcance de un clic. Pero también de alguna forma esperanzador el final del disco donde la escuchamos despertar.
Es cierto la urgencia de sentir que cada vez nos alejamos más por la tecnología, cada uno ve su propia burbuja de contenido en su celular y poco a poco los temas en común de conversación se acaban. Es admirable que un disco se proponga como objetivo hacer sentir de nuevo conectado, humano, a su escucha. Pero creo que esto no es algo nuevo que viene de Tainy, pero sí algo que lo ha estado perfeccionando a lo largo de su carrera. Y es que el Reguetón en realidad es música para traernos de vuelta la corporalidad, el mayor recordatorio que somos humanos.
…Volvamos a las fiestas de Dancehall que mencioné al inicio del texto. Estas fiestas eran disruptivas, rompían la cadena de la productividad capitalista porque su principal razón de ser era promover el ocio, el “hacer nada” más que sentir los bajos vibrar, tu garganta seca por cantar, y los pies cansados. Esto se heredó y se transformó al Reguetón. Ahora es 2023, por alguna razón decidimos aceptar como “normal” el estar sentados frente una pantalla por horas siendo “productivos”, y que en nuestros tiempos de descanso debemos seguir reproduciendo este ciclo capitalista de producción porque sino somos “un lastre y parásitos de la sociedad”. En medio de esta ideología de siempre hacer dinero, alejarse de los otros para proteger tu capital, de cansarse hasta cuando uno duerme, y de que es normal sentir las facturas del mes viniendo a quitarte tus ingresos mientras ves a tu jefe de vacaciones en las playas de quien sabe que país mientras tu desde tu casa haces eso que te pidió porque iba a estar “coupadísimo”; Tainy nos trae un disco que nos pide, exige, sentirnos humanos de nuevo.
Y lo hace también insertándonos memorias en nosotros, algunas verdaderas recordando cuando la conociste en una fiesta bailando un perreo de los clásicos, otras falsas utópicas que más que buscar engañarnos, lo que hace Tainy es recordarnos que todavía hay esperanza en nosotros. Con sus sonidos futuristas y beats profundos de base también nos dice que el bailar, el celebrar, el beber, el reír, el amar, el añorar y desear, son necesarios para vivir, para ser humanos. Para romper los ciclos de explotación y cansancio que nos tienen viviendo como androides.
DATA es una celebración al Reguetón, a sus bases y propone una nueva visión de creación, pero también celebra a la música, y la creatividad, creación, y humanidad en total.
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