Simón Mejía, productor de Bomba Estéreo:
Explorando los caminos de la conciencia
Por Alejandro Meléndez periodistasunidos.com
Bogotá, Colombia. 10 de noviembre de 2023.- El Planetario de Bogotá, ubicado en el epicentro de la ciudad, fue el escenario del IV Foro Respira el Arte, un evento que fusionó el arte con la imperante necesidad de abordar la crisis climática, proyecto del Instituto Distrital de las Artes (Idartes). Durante cinco días intensos, actores del sector artístico y cultural reflexionaron sobre las implicaciones ambientales de las prácticas artísticas. La cuarta versión se centró en proyectar posibles futuros del ejercicio artístico en el marco de la sustentabilidad ambiental.
En el primer día, hubo una conversación única entre Simón Mejía, la influencer Marce La Recicladora y el moderador Jorge Melguizo en la mesa “Voces del arte para la sostenibilidad ambiental”. Al finalizar, pudimos realizar una entrevista exclusiva con Mejía, donde nos sumergimos en su fascinante mundo como el genio musical detrás de la innovadora banda colombiana, Bomba Estéreo. La conversación fue reveladora, ya que compartió su visión única sobre la lucha de los pobladores indígenas y afrodescendientes en Colombia. Desde la autonomía otorgada por la Constitución de 1992 hasta los desafíos actuales, Mejía destacó la armonía ancestral de las comunidades indígenas con la naturaleza y abogó por un equilibrio entre las formas de vida.
En el trabajo que estás haciendo y, sobre todo, en los documentales que nos platicaste (Guardianas y Yuma), ¿cómo es la lucha de los pobladores indígenas y afrodescendientes en estas zonas y cómo lo has visto tú?
Simón Mejía: Sí, pues acá en Colombia, afortunadamente, desde que se cambió la Constitución en el año 92, se le dio mucha autonomía de gobernanzas a las comunidades minoritarias, principalmente a las comunidades afro y a las comunidades indígenas, que ya venían organizadas. Pero digamos que, ya desde el gobierno, se les dio un espacio para que tengan sus propias gobernanzas, porque finalmente ellos, sobre todo las comunidades indígenas, no por el hecho de que estemos en un contexto de cambio climático y en una moda acerca del cambio climático, sino que ellos ancestralmente es lo que vienen haciendo. Los indígenas conviven con la naturaleza de una manera armónica, entonces realmente ellos dentro de su ancestralidad tienen mucho por enseñarnos a la cultura blanca.
En cuanto a gobernanza, a pesar de que no es fácil, sobre todo porque en Colombia hay muchos conflictos, dentro de ellos el narcotráfico que atenta directamente contra esas comunidades. Digamos que si hay un camino avanzado muy grande y a nivel de leyes y a nivel de espacios de ellos para que puedan proteger los territorios donde han vivido por siglos antes que nosotros, pero no es fácil porque el gobierno, los gobiernos del mundo son gobiernos que trabajan bajo otro sistema. Antes, capaz que los dos sistemas chocan un poco, pero yo siento que el camino es encontrar un punto, un puente entre los dos, entre las dos formas de vida: nosotros aprender de ellos y ellos incorporarse al mundo y al sistema económico arrasador en el que vivimos, encontrar un balance en el que el principal afectado de esto sea la tierra. De este desbalance que vivimos en este sistema, entonces de ellos son los que tenemos que aprender, pero acá en Colombia, en el caso particular de estas comunidades, pues todo el tiempo su trabajo está bajo riesgo porque precisamente se enfrentan a esos intereses económicos y muchas veces a la delincuencia, sobre todo el narcotráfico que ocurre en esos lugares. Entonces, no es una tarea fácil, es una tarea donde ellos ponen su vida en peligro.
¿Y cómo convencer a los gobiernos para que cambien las formas gubernamentales? Porque estamos viendo que ya realmente quienes gobiernan son las empresas transnacionales que están en todo el mundo. En México, la mayoría de las zonas donde más asesinan a defensores de la tierra y periodistas están ligadas a una transnacional. Tenemos a un compañero, Samir Flores, que era defensor de la tierra y además comunicador, y fue asesinado por luchar contra una termoeléctrica con financiamiento de transnacionales españolas. ¿Cómo empezar a crear esta conciencia en los gobiernos para que entiendan que las transnacionales se tienen que regular? Está el ejemplo de YouTube, que dice ser un lugar libre, pero en realidad no, también restringe muchas cosas, sobre todo cuando hay luchas sociales. ¿Cómo hacer esa transición para que el gobierno tenga conciencia del rol que juegan estas transnacionales?
SM: Es que las transnacionales dependen directamente del modelo económico y del consumo en el que vivimos. La única manera de regular eso, más allá del gobierno, es que nosotros, como sociedad civil, regulamos nuestro consumo y vetamos el consumo de productos que sabemos que detrás tienen prácticas que no son amigables con el planeta o generan violencia. Entonces, como sociedad civil, podemos acabar con una transnacional. Si el mundo o toda una comunidad entera o una ciudad entera decide que no va a consumir más de ese producto porque sabemos de dónde viene, ahí los afecta directamente, porque afecta su bolsillo. Nosotros también somos parte del problema porque consumimos los bienes que estas empresas ofrecen. Entonces, está en nuestras manos como sociedad civil, más allá de los gobiernos, porque muchas veces los gobiernos están vinculados con el lobby y el dinero de esas mismas empresas que se mueven en los lobbies para generar leyes y políticas que les permitan su extractivismo. Pero nosotros, como consumidores y como sociedad capitalista de consumo, podemos poner un límite, empezar a modelar y hacer un consumo más consciente. En la medida en que ellas vean que ya no tienen esa fuerza de masa que controlan a través del consumo, ahí es cuando se darán cuenta de que no tienen más armas.
Y en la parte que mencionaste a Leonor Zalabata Torres, actual representante de Colombia ante la ONU, y que la comunidad arahuaca de la Sierra Nevada de Santa Marta la designó, además de a Petro, para ir a Nueva York y donde esperas que se forje un espacio de conciencia sobre el indigenismo, ¿cómo se puede implementar y lograr? Porque te pongo un ejemplo: en México, una de las personas que tiene un trabajo ejemplar como funcionario público fue un músico y poeta náhuatl, Mardonio Carballo, y finalmente fue sacado de la Secretaría de Cultura, justo porque no soportaban que un indígena tuviera más peso que la titular en turno. ¿Cómo romper esta parte de las ciudades capitales para que, sobre todo, más gente indígena venga a tomar estos puestos y cambiar esta cosmovisión tan occidental que se tiene de las políticas públicas?
SM: Tiene que ver con un cambio de conciencia, eso también está ligado con la historia de racismo que vivimos aquí en Latinoamérica desde la colonia, porque acá en Latinoamérica nosotros que somos blancos, o yo, soy blanco y también soy hijo de ese mestizaje de la colonia. La colonia dejó como herencia a Latinoamérica la idea de arrasar y pasar por encima de estas culturas, un tema de racismo y religión que nos ha alimentado durante muchos siglos. Hay que romper eso y ver finalmente a los indígenas, no como indígenas, sino como personas que también habitan el planeta y tienen sus propios problemas y conflictos, pero también han sabido llevar una vida más armónica con el planeta, algo que nosotros como cultura blanca no hemos logrado. Mientras no cambiemos esa conciencia arraigada en nuestro ADN de racismo y rechazo hacia las minorías, y no respetemos las diferencias y escuchemos las tradiciones valiosas de otros, seguiremos con el racismo sistemático, la misoginia y todos esos anclajes culturales que llevamos.
Es un proceso que parte de cada individuo, asumirse no como blanco, negro, hombre, afro, indígena, sino como habitante de la tierra, donde todos tenemos el mismo valor. Hay culturas que tienen mucho por enseñarnos acerca de la armonía con el planeta, mientras que nosotros también tenemos cosas valiosas, como la tecnología en función del medio ambiente y la técnica administrativa. Es un trabajo de tú a tú, un trabajo conjunto entre diversas culturas para lograr un mismo fin, movimientos más horizontales. Nosotros, en Latinoamérica, que venimos del colonialismo, todavía tenemos arraigado en nuestra psiquis ese legado, y romper con eso implica romper con siglos de enseñanzas. Entonces, estamos caminando en ese proceso.
Y ya para terminar, nada más que nos digas cuándo van a estar disponibles estos documentales que tienes. ¿Cómo se van a llamar y también si preparaste un soundtrack sobre los documentales y si hiciste la música? Cuéntanos sobre esa parte musical dentro de los documentales.
SM: Por supuesto, todos tienen un tema de soundtrack muy importante que esperamos sirva también como una herramienta de difusión para que la gente vea la película o se conecte, porque acá en Colombia es un país muy musical. Yo he tratado de que a través de la música, y sobre todo de la música que nos ha inspirado, nos inspiró a nosotros. Bomba Estéreo es una banda que viene del mundo indígena y afro, ya que su música tiene raíces en la música folclórica de Colombia y Latinoamérica. Entonces, claro, ahora tenemos un soundtrack que hice yo y el año que viene se estrenarán ambos documentales. El del Río Magdalena se llama “Yuma”, y el de las lideresas tiene un nombre parcial, probablemente cambie, que es “Guardianas”. Ambos se estrenarán en el 2024.
Para ver el tráiler de Yuma y apoyar el documental de Simón Mejía, abrir el siguiente enlace.