Es el sentimiento de cada año, aquel que con el tiempo quedará tan distante que se nos escapará sin apenas darnos cuenta.
Todo es nada, todo es a lo sumo tiempo que fluye.
Por Chulo Castizo
Hace ya una década Vetusta Morla lanzaba su primer álbum, Un Día en el Mundo, aquel que captó la atención del público y la prensa especializada, mientras que en las listas de los más vendidos se codeaban Amy Winehouse, Coldplay o Adele, y al mismo tiempo, pero en otro lugar, Nacho Vegas lanzaba su Manifiesto Desastre, Iván Ferreiro estrenaba Mentiroso Mentiroso, Amaral presentaba su Gato Negro, Dragón Rojo, y Loquillo su Balmoral.
En esta etapa de autogestión, y con Pequeño Salto Mortal como plataforma para la edición de sus discos, se le reconoce como uno de los mejores debuts del año, y ese detalle marcó la diferencia, e hizo que desde ese año fueran mimados por el público. Amados u odiados.
Una suerte de disco que pondría las bases de su estilo, al que siguieron Mapas (2011) y La Deriva (2014), con los que cierran una trilogía en búsqueda de su identidad.
Diez años más tarde, destacarán de nuevo, esta vez, entre los más vendidos con su cuarto LP Mismo Sitio, Distinto Lugar, co-producido por Campi Campón, vinculado a artistas como Jorge Drexler, Natalia Lafourcade o Marlango, y con las mezclas de Dave Fridmann, ex-bajista de Mercury Rev, y responsable del sonido de Flaming Lips, MGMT, o Tame Impala.
Desde la primera escucha se aprecia la madurez y el nuevo enfoque, en cuanto al sonido, sobresalen capas y matices, la experimentación y los arreglos vocales, resultado también de la estancia en los míticos estudios berlineses Hansa, en donde grabó David Bowie, y quizás esa atmósfera permeó en el resultado final.
La referencia al título del disco es ese nuevo enfoque pero con la misma actitud, al sitio lo concentramos en ese espacio invariable, mientras que el lugar depende de quien seas tú en cada momento, y será David García, “El Indio”, su baterista, quién nos ayude a comprender más acerca del nuevo disco.
Descorcharon las nuevas canciones de “Mismo Sitio, Distinto Lugar”, en la Biblioteca Nacional de Madrid, un céntrico edificio de estilo neoclásico que alberga el fondo bibliográfico desde el siglo XVIII, algo poco común. ¿Qué sintieron al presentarlo en el santuario de las letras, una cuestión que tanto cuidan?
Fue un verdadero honor poder presentarlo en un espacio tan emblemático, donde se guarda todo el acervo cultural español, donde conviven las partituras de todos los artistas españoles con la bibliografía de tantos literatos españoles. Nos sentimos con mucho orgullo.
El hecho en sí fue un directo de la RNE, en un marco incomparable, en un auditorio muy moderno y muy preparado, el mejor sitio para presentarlo, con Radio3 y su programa 180 Grados, y con Virginia Díaz al frente que fue quien nos entrevistó, y entre preguntas y vacilaciones íbamos tocando varias de las nuevas canciones, al final sentimos que la gente disfrutó al igual que nosotros.
Quizás la casualidad hizo que se presentaran también en un evento literario, esta vez en la FIL de Guadalajara, en noviembre de 2017 en México, lo que nos lleva a un mismo sitio, pero, a un distinto lugar. Letras que unen, y entroncan un diálogo. ¿Cómo les sienta a las nuevas canciones este formato?
Nosotros jugamos con la plasticidad de cada momento, en cada situación, y esto supone un gran reto para nosotros. En aquella ocasión, en Guadalajara, fue en el marco de la Feria del Libro y con Madrid como país invitado, estuvimos acompañados por la banda Porter tocando el mismo día. Disfrutamos mucho, como siempre que vamos a México. Es un público fantástico.
En una ocasión, por ejemplo, el Museo Reina Sofía nos convocó para realizar un homenaje al
Guernica, un cuadro realmente sobrecogedor, y además tocar frente a él. Era una conmemoración, de carácter tan íntimo, tanto por el lugar como por el significado de la pintura, que implicó tocar con unas especificaciones muy concretas, no podíamos llevar instrumentos de percusión, ni tambores, así que nos adaptamos, al igual que la lírica, todo lo mantuvimos ajustado al espacio, cuidándolo mucho.
Han tenido una carrera de fondo hasta llegar aquí, sacan un cuarto disco, y además manteniendo la misma alineación. En este tiempo, y en retrospectiva, ¿qué es lo que verdaderamente ha cambiado en Vetusta Morla? ¿han conseguido aquello que soñaban?
Lo que soñábamos en aquella época cuando comenzamos, era mover al grupo, personalmente eso es lo que quería, y claro, tocar música, comenzamos cuando estábamos estudiando en el Instituto, el grupo era nuestro hobbie, era el proyecto que iniciamos en común, y que creció hasta donde estamos ahora.
En estos momentos, para mí supone el poder desarrollar un carrera artística, pero, también en el plano laboral y profesional, porque es mi oficio y mi trabajo. Para mí, es el sueño de vivir de lo que me gusta, de hacer música, es nuestro trabajo, y nos permite también hacer otras cosas, por otro lado ampliamos la mira hacia otras disciplinas que nos complementen.
En el plano de desarrollo humano, hemos crecido y hemos madurado, se han creado familias, somos más mayores, pero por encima de todo lo que nos une a los seis es la ilusión por juntarnos y hacer música.
Para la tarea de grabar y enfocarse en este disco, ¿qué es lo que han buscado?
Dadas las circunstancias de un cuarto disco, ha sido un proceso sencillo. Quizás estábamos en un punto diferente, de búsqueda, y eso ha hecho que que el disco saliera así.
El proceso lo realizamos después de una época de inactividad como grupo, como por ejemplo, después de unas vacaciones. Nos reunimos, y cada uno trae nuevas ideas, letras, música, en lo que ha estado pensando… y es ahí donde nos concentramos en la música, en la que todos trabajamos para que salga adelante. Es ese proceso en el que nos dedicamos en cuerpo y alma, pensamos en música, nos concentramos en música y no hacemos otra cosa más que música.
Y eso que siempre hay cuestiones que atender como grupo, siempre hay algo qué hacer, ya sea con la disquera u otras cuestiones que necesitan nuestra atención.
El sentimiento que me causa al escuchar el disco es de rompimiento con todo lo anterior. Con este Mismo sitio, Distinto Lugar han iniciado nueva etapa, suenan canciones que se salen de lo que estilísticamente conocíamos de Vetusta Morla.
¿Cómo es el lugar en donde se encuentran ahorita?
Pues es un lugar parecido, pero, diferente, al cual hay que amoldarse para seguir evolucionando, sin perder la ilusión y la unión de todos. Algo parecido a como cuando vuelves a casa después de mucho tiempo, y te das cuenta de que la casa ha cambiado, el origen es el mismo, pero tú eres distinto. En un punto más musical diría que los sitios son las canciones y los lugares son las personas ocupando y metiéndose dentro de esas canciones y haciéndolas suyas.
El momento preciso en el que nos hemos girado para este disco ha sido nuestra evolución como personas, este disco es una “resituación”, es un profundo giro en lo que habíamos hecho hasta ahora, hemos hecho cambios, hemos mirado al epicentro, nos hemos mirado hacia nosotros mismos, y aunque sigue habiendo cosas musicalmente hablando iguales, hay influencias y conceptos que hemos tocado con otra mirada, con sátira y con humor, porque todo responde a un ejercicio de honestidad, como individuos y como grupo, y de donde sale un disco totalmente honesto.
El proceso de grabación ha pasado por varias fases, estudios, países, y personas que le han dado su sello propio, uno es Dave Fridman, ¿Qué punto les motivó a trabajar con él?
Nosotros queríamos trabajar con un productor que fuera distinto, queríamos otro enfoque de alguien de fuera. Este disco es una coproducción con Capi Campón. Dave F. lo llevó mas allá, nosotros queríamos trabajar con él porque le conocemos como bajista de Flaming Lips, y por los discos en los que trabajó son joyas para nosotros, su sonido nos gusta. Discos como Oracular Spectacular de MGMT, o de Tame Impala. Su trabajo es increíble.
Es muy solicitado y requerido, él elige sobre lo que quiere trabajar. Nos comunicamos con él, y nos respondió, le gustó lo que escuchó y tuvimos la suerte de que nos eligiera. Nos fuimos a su casa estudio, en donde nos alojamos también, fue una experiencia excitante el trabajo que hizo con las canciones, las llevó a otra fase que nosotros ni nos imaginamos.
En cuanto al disco en sí, con un cuidado empaque y diseño de arte, es un disco cortito, apenas 39 min, ¿cuál es el patrón que han seguido para la construcción, cuál es la espina dorsal del disco?
El patrón era que te dejara ansioso de escuchar más y más, que al escucharlo te dejara con ganas de más, de volver a poner el disco una y otra vez, y el concepto es el que se escucha, de total honestidad, limpio, de la necesidad de volver otra vez a ese origen en el que empiezas a proyectar cómo quieres ser.
Rebuscar entre lo que hay, queríamos hacer de las canciones cortas pequeñas expresiones que pidieran por sí solas. Hacerlo intenso y corto era algo de antemano pensado, para contar era lo más real y la mejor baza que teníamos. La honestidad es una cualidad del disco.
En ese rigor espacio – tiempo, ¿cuál lugar o lugares han transitado ya sean mentales, imaginarios, u oníricos para la creación del disco?
¡Ufff!! ¡Qué difícil! Es tan personal que no lo sé, quizás fue el momento vital por del que cada uno pasaba, que quizás era distinto, pero similar, al del resto, las circunstancias de cada uno… A mí particularmente me gusta pensar y conectar con el arte, conectar con los trazos de un pincel, como si fuera una pintura, cada vez que golpeo con la baqueta la batería es como si pintara sobre un lienzo.
Como somos seis y tenemos gustos distintos, debemos jugar con todo lo que nos llega, incorporamos cosas diferentes continuamente. Yo tengo una especial afinidad con el mundo del flamenco, me gusta mucho, pero aunque me guste te diría que no hay nada específico, de tal o cual palo, en el disco, sin embargo, si le escuchas detenidamente, quizás puedas encontrar alguna cosita que enlace por ahí…las canciones apelan a los sentidos de cada uno y es con eso con lo que tiene que ver.
En todo el disco se encuentran estimulantes sensaciones, con mil efectos sonoros, con arreglos, coros, en definitiva mucho preciosismo…¡aparece hasta El Mundo Today!
¿qué referencias musicales tenían en mente?
En este disco no hemos tenido ninguna, en los anteriores claramente sí los había. Para llevar el disco a otro punto según lo que queríamos hemos jugado a ir trabajando con las canciones, a que fueran ellas las que nos guiaran, esas sensaciones o imágenes que causaban las canciones por sí solas.
Cuando estábamos en el estudio, Dave F. nos preguntó en el minuto uno, pero, nosotros no llevábamos ninguna, no la queríamos, y en ese punto es en donde lo dejamos en sus manos y que cada canción tomara su vida propia.
La experiencia que habéis acumulado os hace ya ser un referente del rock en español… en Perú donde tocaréis próximamente os tildan del “mejor grupo español de la década”, en el plano personal, citas como ésta, halagos y la grandilocuencia para etiquetarlos, ¿pesa o engrandece la existencia?
¡Uff!! ¡Qué me dices!!! ¡Pues son muy bien recibidas!! Pero, hay que tener cuidado, tener los pies en el suelo, y saber cuál es el camino de cada uno, mantener la cordura.
Iniciamos Gira en ciudades como Lima, en donde nunca hemos tocado.
Inician gira Latinoamericana en marzo, abren en Lima, pasan por Santiago de Chile, Bogotá, Medellín, y Buenos Aires. El día 15 en El Plaza Condesa y tres días después en el Vive Latino 2018, ¿qué les provoca tocar en estas ciudades, en estos nuevos lugares?
Nos encanta conocer nuevos lugares, nuevas culturas, con el grupo nos gusta compartir con la gente, visitar ciudades, y tocar en foros donde nunca hemos tocado, es un verdadero reto que lo tomamos con mucha satisfacción. Nuestro primer concierto y el inicio de la Gira es en Lima, adonde nunca hemos ido, y no lo conocemos. En definitiva es lo mejor que nos puede pasar, mostrar nuestras canciones y que la gente las haga suyas, estamos muy agradecidos.
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