¿Son los eSports el nuevo fenómeno de los deportes?
Los deportes electrónicos no son algo nuevo. Hace décadas que se celebraron las primeras competencias. Sin embargo, es desde hace relativamente pocos años que hemos empezado a oír hablar de ellos con cierta naturalidad. Algunos no los consideran un deporte en sí, pues no tiene el componente de rendimiento físico o “de atleta” al que nos tienen acostumbrados las disciplinas tradicionales. Pero el factor competitivo está muy presente. Y sus audiencias, por encima de los 500 millones de espectadores al año, certifican que es un espectáculo deportivo de primer orden.
Ante tal nivel de seguimiento, se están creando nuevas ligas y competencias alrededor del mundo, de distintos títulos y de carácter diverso (locales, regionales o internacionales). Este fenómeno, además, está activando otros sectores, como el de las apuestas online, ya que los pronósticos para los eventos de eSports están entre los más visitados de estos portales. También es una de las principales fuentes de audiencia para las redes sociales; especialmente, para webs de retransmisiones como Twitch, que se han convertido en líderes en determinados sectores gracias al impacto de los videojuegos y las competencias relacionadas con éstos.
Precisamente, las redes sociales, como medio de promoción, propagación y retransmisión de eventos es uno de los factores que está tras su increíble crecimiento. Los canales televisivos se han mostrado, históricamente, muy rígidos a la hora de retransmitir los eventos deportivos: con horarios determinados, cambios de programación, atención sólo a competencias locales, pago por visión, etc. En cambio, las redes permiten una flexibilidad, una libertad y una capacidad de interactuar que ha conquistado a muchos aficionados. Además, la gran mayoría ya las utilizaba antes de seguir los deportes electrónicos, con lo que les representa un entorno conocido y cómodo.
Esto ha ocurrido, en mayor medida, con un público joven. Pero es que, precisamente, este es el perfil principal del seguidor de los eSports. Por tanto, el cambio generacional tiene mucho que ver con estas nuevas preferencias deportivas. Estos jóvenes han crecido familiarizándose con los videojuegos e, incluso, pasaron de competir contra la máquina a competir contra otras personas, dado que llegó la conexión a la red al mundo de estos juegos. La rivalidad en este entorno virtual es natural para ellos. Y ver competir a los mejores, en títulos que conocen bien, ya que son usuarios de esos juegos, es una fórmula con grandes posibilidades de éxito, como ha acabado resultando.
La tecnología ha llegado a todos los sectores productivos y de ocio, evidentemente. Pero ha tenido un especial impacto en los eSports, dada su naturaleza digital. Por un lado, encontramos juegos evolucionados, más complejos, de mayor calidad. Por otro, tenemos las retransmisiones más estables, los directos con más funciones añadidas, las redes más rápidas,… Todo va a favor de estas competencias con una tecnología más avanzada. También el seguimiento a través del celular, con nuevas redes de datos y terminales más punteros a nivel técnico. Esta forma de conectarse a los eventos permite aún más libertad a los aficionados, que pueden seguir los campeonatos desde cualquier lugar y en cualquier momento.
Más competiciones y un público joven es algo que llama, poderosamente, la atención de los anunciantes. Las marcas han descubierto que los deportes electrónicos son un fantástico escaparate para potenciar su imagen y conseguir más ventas. Son modernos, tienen un target muy atractivo y transmiten los valores deportivos. Por tanto, su inversión en publicidad en estos eventos va en aumento. Y eso implica mayores ingresos para los organizadores, lo que hace crecer, aún más, al sector, dado que les dota de mayores recursos.
En definitiva, son diversas las razones que explican el auge de este fenómeno. También el mayor nivel de conocimiento de estas competencias o el “boca a boca”, que aumenta su seguimiento e incrementa la base objetiva de público. Las previsiones apuntan a que este crecimiento continuará en los próximos años, de forma natural y orgánica. Pero es que, además, los siguientes saltos tecnológicos aún pueden acrecentar más esta realidad. Por ejemplo, con nuevos eventos que estén basados en la Realidad Virtual o con la aparición de los juegos desarrollados con la popular tecnología Blockchain. Y, eso, sin contar con otros elementos promocionales, como la más que posible y pronta incorporación de los eSports a las categorías olímpicas. En definitiva, parece que los deportes electrónicos van a seguir su camino ascendente.