Uno es miembro fundador de Yellow Magic Orchestra, pionero de la música electrónica y un pianista distinguido con diversos estudios es música clásica y jazz. El otro, un visionario compositor de microsound y glitch que trabaja desde el infinito atómico de cada beat. En cierto sentido, lo único que tienen en común es su arquitectónica composición electrónica y que sus naciones pelearon como aliadas en la Segunda Guerra Mundial (el primero es japonés y el segundo alemán). Fuera de eso, Ryuchi Sakamoto y Carsten Nicolai no poseen si quiera estéticas similares, y cada uno revolucionó sus aficiones en sus propios términos. Sakamoto, construyendo una leyenda del tamaño de Yellow Magic Orchestra, a la par de su figura como solista: un pianista y compositor sumamente ecléctico. La música de Sakamoto, es una declaración de apertura a occidente; un choque de fuerzas que atraviesa de un lado a otro del mundo en un compás. Pero no un lenguaje universal; es una lenguaje transitorio. Bandas sonoras, grabadas para directores como Pedro Almodovar, Oliver Stone y Bernando Bertolucci (la cual fue realizada para El último emperador y le mereció el premio Óscar en 1987); algunos videojuegos, y colaboraciones con artistas como David Sylvian, Fennesz, junto con álbumes en solitario como Beauty (1990), Out of Noise/Playing the Piano (2009) y el impresionante Discord (1998) certifican lo evidente: Sakamoto es uno de los grandes creadores de la música contemporánea.
Nicolai, por su parte, mediado por un interés genuino en las propiedades teóricas del sonido y la acústica, tramó con suma inteligencia, un plan que lo ha llevado a crear proyectos como su disquera Noton. Archiv Fuer Ton Und Nichtton, que luego fusionaría con la de otro visionario alemán enloquecido Olaf Bender para formar la aclamada Raster. Noton, donde han editado los álbumes que dan sentido a esta presentación.
Para cualquiera que se haya aproximado alguna vez al trabajo de la disquera, será un privilegio saber que las discretas atmósferas electrónicas de álbumes como summvs(2011), Vrioon (2002) e Insen (2005) son medulares en las presentaciones de Sakamoto y Alva Noto. Prácticamente las trasportan al escenario; utilizando las dinámicas implementadas en el álbum para crear espacios de sonoridad congelada, acústicas pequeñas, microscópicas en el oído; acompañadas de pesados acordes y melodías acuáticas ejecutadas por Sakamoto.
Sobra decir que este concierto es imprescindible y que el Teatro Metropolitan es un escenario ideal para la ejecución de esta suculenta experimentación sonora. Si un festival como Aural merece un cierre espectacular, Alva Noto y Ryuchi Sakamoto seguro harán que sea memorable.
Alva Noto & Ryuchi Sakamoto
Miércoles 16 de mayo, 21:00
Teatro Metropolitan
$850 y $720.
exageradamente caros los boletos
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