RPM: 35 años del álbum debut de The Specials

Por: Ernesto Acosta Sandoval (@admiralhalsey_)

Better think of your future: 35 años del álbum debut de The Specials 

¿Qué era ser adolescente en Londres en 1979? Para ese momento, dos años después de que el Punk había llegado a las costas británicas, se había comprobado que, en efecto, no había futuro. O al menos no uno tan claro como los políticos querían pintar. La juventud seguía enojada y tenían motivos de sobra para estarlo, como ya lo habían plasmado The Clash, los Sex Pistols y los Buzzcocks en sus respectivos álbumes. Todos los políticos y los adultos les habían mentido, falsas promesas de bienestar, igualdad y prosperidad. ¿Qué quedaba? Bailar, quizá. Crear música para escapar de la desesperación del desempleo y las tardes grises. Adoptar ritmos antillanos, revivirlos y darles un giro, ponerles letras con las que los contemporáneos se pudieran identificar.

Mientras The Clash y los Pistols hablaban de temas políticos que para algunos podrían parecer lejanos a su realidad más tangible, The Specials le apostó a todo eso que tenían más cerca: peleas entre bandas rivales (“Gangsters”, “Concrete Jungle”), motines raciales (“It’s Up To You”, “Doesn’t Make It Alright”), embarazos precoces (“Too Much Too Young”) y exorcizarlos por medio de un sincretismo que las otras bandas no podían entender por ser parte de una clase privilegiada (no hace falta indicar aquí que Joe Strummer era hijo de diplomáticos y que John Lydon a final de cuentas era un niño con demasiado tiempo libre en sus manos manipulado por Malcolm McClaren). The Specials plasmó en su álbum debut homónimo el miedo y la incertidumbre a ser adolescente en tiempos de completa oscuridad pero lo ocultaron con trompetas, vestimenta elegante de rudeboy (herencia directa de los mods sesenteros), lentes oscuros y ritmos sincopados. La pulidísima producción, pero que en ningún momento se siente forzada, de Elvis Costello sólo reafirma que los Specials estaban en otro nivel. Costello sacó lo mejor del grupo porque el mensaje a transmitir tenía que ser claro y directo. ¿De qué hubiera servido no hacer entender al público lo que el sexteto quería diseminar?

El subtexto en The Specials, como álbum completo, parece ser el “No future” de los Sex Pistols pero más razonado, más armónico, menos pesimista y dejando entrever que quizá no todo estaba tan perdido. Así que pongamos la aguja sobre el primer surco y saquémosle chispas a la pista de baile hasta que salga el sol.