Por moonman
Fotos: Roja (Claudia Ochoa)
Muchas bandas independientes se enfrentan con el gran reto de dar un salto abismal (o salto de fe como algunos dicen) una vez que se dieron a conocer para seguir sorprendiendo (y sorprendiéndose). Muchos quedan a la mitad como Homero cuando quiere saltar el acantilado y otros llegan suavemente al otro lado. Para hacer esto se necesita que la fe en la banda sea más fuerte que nunca y que esa magia que se hace al reunir diferentes universos mentales en un estudio logren esa chispa que se convierte en un faro que marca el camino a seguir.
Algo así les pasó a Ayer Amarillo, quienes justo para marcar una nueva etapa dejaron atrás su viejo nombre Yellow Yesterday. Todos estos sueños compartidos y hoyos negros a nuevos horizontes musicales se ven materializados en Sueño Delta, una gran producción donde los sonidos prolongados y ecos dan un gran matiz de colores y sonidos que se convierten en un “ear candy”.
Los visitamos en su sala de ensayo, justo en ese momento donde dejan que todo fluya para llegar a islas desiertas, y si tienen suerte, a nuevos continentes.
¿Cómo se formó este proyecto?
Andrés: Mi primer banda fue con el Voodha como a los 12 o 14 años y luego con el Jones, años después decidimos retomar el proyecto porque me reecontré con ellos y les pregunté si tenían una banda para que armáramos una. Para el baterista preguntamos por Twitter si alguien quería y se acercó uno profesional… pero creo que no nos vio futuro. Luego ensayamos con Mariana y se quedó. Lo que era Yellow Yesterday no tiene nada que ver con lo que es ahora porque ahora nos conocemos más y tenemos muchos gustos en común.
Todos los proyectos independientes tienen la obligación de dar saltos abismales una vez que se dieron a conocer para captar la atención, ¿cómo fue en su caso?
Mariana:Definitivamente Sueño Delta es el paso más grande porque nos costó mucho trabajo hacer las canciones al unir piezas de canciones. Al principio pasa con todas las bandas que vas viendo qué onda en el camino. Desde que empiezas todos quieren sacar algo y al principio teníamos ciertas cosas pero no nos sentíamos cómodos con ellas. Ahora que ya nos entendemos mejor porque ya sabemos cómo toca cada quién.
Cuando uno inicia un proyecto tiene cierta idea del molde y en el camino le vas recortando y tomando forma, ¿sabían que este proyecto iba a ser importante para ustedes?
Paco: Todos sabíamos que íbamos a hacer algo padre porque después de tocar cinco años necesitábamos formalizar las canciones porque se iban modificando mucho de una semana a otra hasta que las formalizamos. El resultado de Sueño Delta fue lo mejor que pudimos haber hecho. La última canción que grabamos, que es “Vértigo”, es la que refleja lo que es la banda hoy y posiblemente en el futuro. El disco tiene diferentes sonidos porque fue un proceso de dos años pero fue agarrando cierto sonido característico.
Es como el Greates Hits de Los Dynamites en el sentido de que es una recopilación de varias canciones que uno como escucha no llega a percibir, ¿cuál canción es en donde dejaron que todo fluyera, a diferencia de un sencillo?
Mariana: Fue muy libre, en realidad no lo pensamos para hacer sencillos. Algo raro es que todas tienen estructuras raras, pero no fue a propósito. Muchas canciones no tienen coros pero nos gustaban así. En el estudio metimos un jameo que lo convertimos en la introducción (“Abre“) y la salida (“Cierra“)al cambiar las progresiones de los instrumentos. Eso fue gracias a Mou, nuestro productor.
Voodha: Incluso tuvimos que recortar varias canciones por lo mismo
Supongo que lo pensaron para el vinilo, ya que incluso en viejas épocas una canción era toda la cara de un disco
Mariana: Teníamos la idea de sacar el vinilo pero a la hora de mandar todo a la maquinadora nos dimos cuenta que por muy poquito tiempo no cupo en un disco y doblaba el precio. Al final va a hacer doble por lo que cambió la estructura y orden del disco.
¿Qué tal se sintieron con la meta superada del fondeo?
Andrés: Muy contentos porque sí fue un gran paro. Necesitábamos ese dinero porque todo lo invertimos nosotros. Lo que ganamos de las tocadas se va un fondo de la banda… de repente rompemos el cochinito a cada rato para que alcance para una rola. Nuestro manager nos lo sugirió, fue un reto porque nos hubiera dado mucha pena decir “no se completó” porque no generó expectativa y le valió gorro a la gente. Afortunadamente se logró y con eso se maquinará el vinilo.
Paco: Nos dio gusto porque los que siempre apoyan son los papás o los amigos, pero sí había un montón de banda desconocida que nos seguía fueron más allá al poner un like y apoyaron económicamente el fondeo.
Andrés: También nos sorprendió que la recompensa que más se vendió fue una de las más caras, que era la del paquete con vinilo, serigrafía y playera.
Mariana: Teníamos dos cada quien pero se rompieron para la continuidad del video. Las piñatas son del proyecto de un amigo operador de Reactor y me dio gusto que llegaron hasta el escenario del Corona Capital con Damon Albarn.
Los discos son fotografías que resumen cierta época en la que fueron grabadas, pero en vivo se pueden traer al presente, ¿qué tanta libertad se dan?
Voodha: Todavía no hemos llegado a poner límites. Estamos en una etapa en la que hemos tocado mucho estas canciones, por lo que en los ensayos retomamos mucho el jameo y no delimitamos las canciones para que fluyan. Las grabamos y escuchamos para ver qué se puede retomar.
Paco: Ha habido jameos de más de 30 minutos (risas)
Andrés: Es bueno grabar los jameos porque uno se da cuenta qué pedal usaba y cuál efecto tenía. Como ya tocamos mucho el disco también nos urge salirnos del molde y ver qué sigue.
En el estudio se nota que han invertido mucho en equipo y pedales que les han dado la posibilidad de ampliar su sonido, ¿qué tanto afectó esto a Sueño Delta?
Voodha: Mucho. Escuchas el EP anterior a este y es una gran diferencia.
Andrés: Por eso y otras razones le cambiamos el nombre de la banda en español porque ya no tenía nada que ver. Los 50 fans de nuestro Facebook fueron los que se dieron cuenta primero (risas). Fue muy liberador y talachero experimentar porque tomamos clases de canto y ayudó a que el disco nos gustara.
Paco: Teníamos una regla de grabarlo en vivo, pero es un rollo porque si alguien la cagaba era reiniciar la toma. Al final eso se refleja en la vibra del disco porque no está grabada la batería, guitarra o teclados. Esa forma de grabar deja el espíritu original en vivo a un lado.
Mariana: Grabar en vivo nos amarró mucho para tocar. No hay casi nada de edición, sólo muy poca en algunas voces y uno que otro teclado.
De estas fotografías, ¿cuál creen que en unos 20 años que se pongan nostálgicos y lo escuchen de nuevo será con el que mejor recuerden lo que está pasando hoy?
Mariana: Para mí cambia constantemente dependiendo de la etapa. Ahora me gusta mucho los dos jameos porque tienen un sonido de ninguna época. Es muy libre y etérea y es ideal para acompañarte. Si tuviera que escoger por cuáles envejezcan mejor escogería esas dos.
Paco: “Combustión Espontánea” es de las más padres del disco a pesar de que el cierre me gusta. Esta canción es muy libre y hace mucho que no escuchaba una canción así. Tuvo que ver mucho Mou, porque fue una persona muy constructiva al considerar todas nuestras opiniones al no rechazarlas, sino replantearlas y cuestionar si esa idea realmente servía con sólo cambiarle algunas cosas.
Andrés: Me gusta mucho “Sinestesia”, es la más rara del disco y son como tres rolas en una. Fue un reto grabarla. La he escuchado mucho últimamente y al principio se me hacía complicada pero me gusta cada vez más. También me gusta “Sin Preguntarme” porque es la colaboración más completa de Mou porque hizo todo el arreglo orquestal y el piano. Era la que entró de panzazo y al final va muy bien con el disco.
Voodha: Creo que “Vértigo” porque fue una canción que hicimos en los últimos minutos de grabación y creo que es la primer rola del disco que la construimos al mismo tiempo en un ensayo. Fue un parteaguas porque aprendimos mucho de cómo tendría que hacer la dinámica en la banda en vez de hacerlo por cachitos. El sonido es completamente diferente a lo primero que hicimos.
Mariana: De hecho ya habíamos terminado de grabar y de repente salió y la metimos de una vez. Mou ya estaba en Monterrey y se la mandamos.
¿Qué sigue para Ayer Amarillo?
Mariana: Los discos, a menos que sean algo muy impulsivo, llevan mucho tiempo. Casi a todas las bandas les pasa que sienten viejo el disco una vez que sale porque es un proceso largo. Al final uno se pregunta ¿ahora qué? Por lo que ahora estamos haciendo jameos para ver qué cosas nuevas nos gustan para así grabar nuevas canciones.
Andrés: Tal vez saquemos una canción en vez de un EP o disco porque todo esta cambiando mucho y ya no hay reglas muy definidas de cómo tratar tu música.
Paco: Este año queremos tocar y salir del circuito del DF y Estado de México para dar a conocer el disco en otros lados.
