Wilco
Wilco (The Album)
Nonesuch Records
7.8
La contracción a “Will Comply”* inspira también al nombre de la agrupación de Chicago, Illinois que comanda Jeff Tweedy. Cada uno de los seis lanzamientos de Wilco –desde A.M. (1995), hasta Sky Blue Sky (2007)- han sido venerados por la crítica gracias a su naturaleza propia. Pese a la oscilación constante entre folk, americana y rock alternativo, la inquietud de su líder por experimentar con influencias de músicos punk como Television o blues como Woody Guthrie, el cambiante sexteto ha logrado esquivar las etiquetas de algún género específico; sin embargo, la identidad de Wilco sigue sin definirse con claridad.
Para 2009, estos norteamericanos deciden elevar al cubo la complejidad en el significado de su nombre con su séptimo estudio: Wilco (The Album). Éste incluye entre sus canciones una afirmación más al citado binomio: “Wilco (The Song)”. Sin cuestionar aún la calidad musical de la producción, la triple reiteración podría definir el sonido de este último álbum. Aunque en el fondo también levanta sospecha sobre si Wilco descubrió el inalcanzable factor de identidad, o si Jeff Tweedy cedió ante las implicaciones de su nombre.
En esta séptima producción, Tweedy hizo del estudio de grabación un instrumento más, con el fin de esculpir a detalle el sonido que lo caracterizaría. El resultado son once canciones de gran manufactura que fluyen con facilidad desde sus primeras escuchas. El trabajo cuenta con mayor dinamismo a su antecesor Sky Blue Sky, mientras que la experimentación de sus obras más reconocidas –”Yankee Hotel Foxtrot” y “A Ghost is Born”-, se diluye en formas seguras, más no obvias. Wilco (The Album) no es símbolo de un arranque de ego en busca de reconocimiento, sino la aproximación madura a aceptarse en un sonido propio.
En la redundancia del nombre, la primera canción en el álbum es muestra del consuelo que Jeff ha encontrado en el mismo grupo, pese a su dependencia a los analgésicos (un motivo constante en la biografía del músico, la banda y el mito que han creado). La sencillez, honestidad y un poco de distorsión caracterizan a “Wilco (The Song)”, la cual reconforta a esos otros que se sienten en desgracia y les recuerda “Wilco will love you…” sin importar lo que ocurra.
Esta placa homónima, presenta al mismo Wilco capaz de enternecer hasta la lágrima y extrañar a su público hasta que cambian de track en el reproductor. “Deeper Down” y “One Wing” destacan en la oncena por su melodía suave y la penetrante melancolía vocal de Jeff, que se transporta hacia la parte final del álbum con la mandolina de “Solitaire”. La balada “You and I” presenta un hecho inédito en la discografía del conjunto norteamericano: el recurso del dueto. En éste aparece la gentil voz de la canadiense Feist para acompañar a Jeff Tweedy en la historia de una pareja que busca mantenerse unida “All the good with the bad / Make something that no one else has but / You and I (Todo lo bueno y lo malo / hacen algo que nadie más tiene / excepto tú y yo)”.
Las influencias musicales toman un rol protagónico a lo largo del álbum. “You Never Know” y “Sunny Feeling” entonan acordes que bien pudieron escribir John Lennon y George Harrison desde el más allá; mientras que la canción “experimental” del álbum –“Bull Black Nova”- recuerda los momentos de kraut y punk rock previamente explorados en A Ghost is Born, pero rompe con la continuidad en el trabajo hasta sonar incómoda.
Un elemento a destacar a lo largo de sus casi cuarenta y tres minutos es la extraordinaria ejecución. Momentos como “Country Disappeared”, “Everlasting” o “I’ll Fight” ilustran la satisfacción de Wilco por componer temas de sencilla interpretación, contundencia en solos instrumentales y fácil registro en la memoria.
Wilco (The Album) es un material completo en términos de producción, ejecución y buena lírica; la mayor virtud es el sonido homogéneo entre sus canciones. Pese a los múltiples cambios de alineación, el sexteto suena más integrado y deja de ser la banda de acompañamiento para Tweedy. Wilco finalmente encuentra la claridad para unir todos sus elementos en una sola identidad; sin embargo, ésta ha dotado a la banda de cierta estabilidad perceptible a lo largo del álbum.
La inquietud que despierta escuchar este séptimo estudio es una posible zona de confort; misma que nos lleva a la interrogante de inicio. Wilco parece hallar en el trinomio leitmotif del álbum un lugar sin retos que se ajusta a las necesidades –tanto propias como de su público-, y sacrifica otras de índole creativa. La ecuación elevada al cubo puede arrojar resultados positivos, aunque empieza a sonar constante.
* Will comply.- Código de comunicación utilizado en la milicia y la aviación que implica que el receptor de un mensaje se ajustará a las necesidades del emisor.
Excelente reseña. Wow. La mejor y mas completa reseña que haya leido en mucho tiempo. No podia dejar de leer. Excelente redacción, aumentenle el sueldo a Fo.
coincido: muy buena reseña, quiero el disco!
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